Mantener los costes de la nube bajo control es una lucha constante. Las empresas pierden el control de sus presupuestos y gastan incluso un 23% más de lo planeado o terminan aprovisionando en exceso sus cargas de trabajo. Aquí veremos cómo optimizar la nube de AWS con estas 5 prácticas.

La optimización de costes en la nube consiste en lograr un equilibrio saludable entre precio y rendimiento. Normalmente, se busca que las aplicaciones tengan suficientes recursos, pero a la vez buscamos evitar el desperdicio de la nube.

Cómo optimizar la nube de AWS con estas 5 prácticas

Asignar costes para varios equipos usando etiquetas

Es posible que varios equipos o departamentos contribuyan a nuestra factura de la nube de AWS. Necesitamos una forma de hacer que esto sea visible y, por qué no, predecible.

AWS ofrece dos herramientas útiles para clasificar los gastos por cuentas, organizaciones o proyectos.

• AWS Organisations: Para administrar y gobernar el entorno de forma centralizada mientras se escalan los recursos de AWS. Incluye presupuestos y políticas aplicadas a cuentas o grupos.
• Etiquetando recursos: Utiliza etiquetas de recursos en AWS Cost Explorer y crea etiquetas para cada equipo, entorno, aplicación, servicio y función. Activa la agrupación de costes para estas etiquetas y obtendremos los informes que necesitamos en la consola de facturación de AWS.

Elige el tipo de instancia correcto

AWS actualmente ofrece más de 150 tipos de instancias EC2 con combinaciones completamente distintas de CPU, memoria, almacenamiento y capacidad de red. Cada uno viene en uno o más tamaños, por lo que podemos escalarlos fácilmente.

Es posible que nos sintamos tentados por una instancia que parece asequible, pero ¿Qué sucede cuando comenzamos a ejecutar una aplicación con un uso intensivo de CPU en ella y experimentamos problemas de rendimiento? Esto podría afectarnos bastante a varios niveles, de reputación, por ejemplo.

• Debemos empezar por definir los requisitos de nuestra aplicación en términos de CPU, memoria y almacenamiento, además de la red, claro.
• Debemos prestar atención al elegir entre instancias densas en CPU y/o GPU (la GPU se adapta mejor al machine learning, por ejemplo).
• Verifica las capacidades de la instancia mediante evaluaciones comparativas: elimina la misma carga de trabajo en cada tipo de máquina y verifica su rendimiento.
• Verifica las limitaciones de transferencia de almacenamiento y asegúrate de que la máquina virtual que seleccionemos tenga el rendimiento de almacenamiento que nuestra aplicación requiere.

Aprovecha las instancias de spot para obtener un ahorro de hasta el 90%

En las instancias de spot, pujas por recursos que AWS no está utilizando ahora y se puede ahorrar hasta un 90% en los precios según la demanda. Muchas empresas pierden spot instances porque no están seguras de cómo manejar las interrupciones.

Antes de nada, debemos verificar si nuestra carga de trabajo está lista para esto. Para aumentar las posibilidades, debemos configurar grupos de spot instances (AWS Spot Fleets) y solicitar varios tipos de instancias simultáneamente. Al seleccionar una instancia de este tipo, debemos elegir una que sea menos popular que otras, ya que es menos probable que sufra una interrupción. Se puede comprobar la frecuencia de interrupción en AWS Spot Instance Advisor.

Usa el escalado automático

Las cargas de trabajo tienden a variar mucho y los aumentos repentinos de tráfico pueden afectar al rendimiento si no estamos preparados para manejar ese aumento de forma automática.

Si nuestra aplicación recibe tráfico inesperado, podemos ofrecer una mala experiencia si confiamos en el escalado manual. Al agregar recursos, corremos el riesgo de gastar de más cuando el tráfico disminuya.

Utiliza herramientas como Amazon EC2 Auto Scaling y AWS Auto Scaling para monitorizar tus aplicaciones y ajustar automáticamente la capacidad para un rendimiento estable y predecible al menor coste posible.

Evita comprar capacidad por adelantado

En las instancias «Reservadas» , nosotros compramos capacidad por adelantado en una zona de disponibilidad específica por un precio mucho más bajo en comparación con la opción bajo demanda. De esta forma, nos comprometemos con una instancia en particular y no podemos cambiar esto más adelante. ¿Y si los requisitos cambian?

AWS también ofrece planes de ahorro en los que nos comprometemos a usar una cantidad específica de potencia durante un tiempo determinado.

En ambos casos, corremos el riesgo de encerrarnos con el proveedor de la nube y comprometernos a pagar por recursos que podrían no tener ningún sentido. Estas opciones eliminan cualquier flexibilidad de escalado o capacidad para configurar la distribución en múltiples regiones o zonas fácilmente. Como resultado, perderemos opciones más rentables.