La directora de VW España, Laura Ros, lo tiene claro: «En Volkswagen tenemos que convertir el software en el core de nuestro negocio». La compañía alemana de automóviles ha realizado una contratación de 10.000 ingenieros de software que tienen un único objetivo: convertirlo en el núcleo de su negocio. Volkswagen fue el líder del sector automovilístico mundial en los últimos años hasta 2020, cuando fue superado por la marca japonesa Toyota en un mercado marcado por la pandemia.
Con esta maniobra, lo que buscan en la marca de Wolfsburgo es hacer que el diseño de la informática propia que llevan sus vehículos pase del 10% actual al 60%. Esto es lo que explicó Laura Ros, Directora de Volkswagen España en una entrevista para Auto Bild.
«En Volkswagen tenemos que convertir el software en el core de nuestro negocio»
«Tenemos que convertir ese software en el core de nuestro negocio, porque este software es el que nos va a permitir hacer una gestión más eficiente de las baterías, aumentar su autonomía y controlar todos esos asistentes a la conducción. Al final son los que determinan el comportamiento del vehículo y el comportamiento del vehículo es la experiencia de conducción, es la seguridad».
Esta forma de pensar forma parte de la estrategia Accelerator de la compañía. Con esto, pretenden ir más allá de ofrecer «el mejor producto en hardware», en el elemento físico del vehículo, a poner todo su empeño en la tecnología. Esto también, claro, incluye el desarrollo del vehículo autónomo. Para esto, la ejecutiva de la marca resaltó proyectos como «Trinity«. Se trata de un modelo nuevo que lanzarán en 2026 y que se basa en una plataforma con un nivel de autonomía superior al nivel 2. Este nivel, de forma resumida, significa que el vehículo «conduce sólo» aunque no tiene capacidad para detectar obstáculos y objetos, con lo que el conductor debe ir atento. En el nivel 3, ya tendríamos esa detección de obstáculos, con lo que el conductor a veces conduce y a veces no. El conductor debe estar listo para intervenir cuando el vehículo se lo pida.

«Será la plataforma de referencia para todo lo que será el desarrollo de la conducción autónoma. En el año 2030 se equipará en el 80% de los modelos del grupo».
El software a la cabeza una vez que el hadrware ya lo está
Volkswagen tiene claro que debe ponerse al día en el software y llevar a la empresa hacia la digitalización. También quieren enfocarse en los nuevos usos de los vehículos que demandan sus clientes. Ros hace hincapié en que esto les va a permitir ofrecer a los clientes servicios adicionales como asistentes de viaje.
«Y a lo mejor no tener que pagar por tener ese servicio durante todos los días del año, sino simplemente reducirlo a ese período de tiempo en que lo necesita. Porque va a hacer algún viaje a la montaña o a otro país donde necesita otra cartografía en el navegador o servicios en torno a la movilidad». Otros ejemplos que puso la ejecutiva fueron «pagar por parking o gestión de los puntos de carga, encontrar esos cargadores en su ruta y pagar por esa electricidad desde el coche sin necesidad de pagar aparte con la tarjeta de crédito como hacemos en las gasolineras».

También la digitalización es un tema clave a tener en cuenta al hablar de seguridad. Esto ayudará sin duda a reducir los accidentes y también el desarrollo de las baterías va a reducir la dependencia de materiales escasos. Esto a su vez va a llevar a una reducción de unos costes que pueden suponer hasta el 30% del vehículo.
«Muchos clientes ha dicho «bueno, si Volkswagen ahora está apostando por esta tecnología, me da confianza para dar este paso» (hablando de estas nuevas tecnologías). Y lo estamos viviendo en mercados como el noruego, que es el más adelantado de Europa en movilidad eléctrica. Estamos consiguiendo cuotas impresionantes».