El inventario devuelto crea unos 11 mil millones de euros de desechos de vertedero cada año y emite más de 27 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, según Optoro. Las devoluciones no sólo suponen costes monetarios sino también medioambientales.
Desde la elaboración de la política perfecta hasta la logística de navegación, las devoluciones son un componente importante de un negocio minorista.
Pero, ¿Cuál es el coste final de las devoluciones? Para empezar, no todos los productos devueltos regresan a los estantes. Esto significa que a menudo son relegados a un vertedero, lo que tiene un gran impacto en el medio ambiente.
Como se informó anteriormente, el impacto financiero para los minoristas es grande: las devoluciones totales en 2021 representaron más de 761 mil millones de dólares en mercancías el año pasado. Además, se estima que se devolverán 135 mil millones en bienes en los Estados Unidos entre el Día de Acción de Gracias y finales de enero, un aumento del 12,5 % desde 2021, según Optoro.
Las devoluciones no sólo suponen costes monetarios sino también medioambientales
Pero el costo ambiental de las devoluciones también es grande. Es un componente del proceso de devolución del que algunos consumidores pueden no estar al tanto, incluso entre aquellos que se esfuerzan por comprar de manera respetuosa con el medio ambiente.
El inventario devuelto crea 11 mil millones de euros de desechos de vertedero cada año y emite más de 27 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono. Esto es el equivalente a la conducción de un año para 5.9 millones de automóviles, según Optoro.
El problema es más pernicioso con el comercio electrónico, dado que las devoluciones en línea generaron un 14 % más de desperdicio que en la tienda en 2021.
La ropa es una categoría notoria por sus altas tasas de devolución. El año pasado, se devolvieron el 12,2% de los productos de ropa. Solo han sido superados por las piezas de coche (19,4%), según la Federación Nacional de Minoristas. Y a medida que se realizan más compras en línea, las tarifas aumentan ya que los clientes no tienen probadores y, a menudo, recurren al tallaje «a ojo», o compran varios tamaños a la vez con la intención de devolver los que no les quedan.
Más de la mitad (58%) de los consumidores tienden a poner entre paréntesis sus compras, según un estudio de Navar. En los EE. UU., hay un estimado de 11,3 millones de toneladas de desechos textiles, según la EPA.
Probarse la ropa virtualmente podría ayudar
La tecnología de prueba virtual de 3DLook ayuda a los compradores a encontrar el ajuste perfecto para el tipo de cuerpo en la primera compra. Minimiza así la necesidad de devoluciones. La compañía dice que ha podido reducir los rendimientos en un 6% a través de su tecnología de probadores virtuales llamada YourFit.
La tecnología de Optoro es una solución integral que automatiza todo el proceso de devolución y garantiza que un producto se vuelva a colocar en el estante a su precio completo. También que se envíe para reventa, venta al por mayor o incluso se done a organizaciones benéficas, según su estado.
Los clientes de Optoro incluyen Ikea, American Eagle y Best Buy.
No existe una solución única para las devoluciones. Es uno de los obstáculos más grandes que enfrentan los minoristas, pero un obstáculo que deja muchas oportunidades para mejorar los resultados y reducir el impacto ambiental, que muchos minoristas hacen parte de la ética de su empresa.
