Desarrollar un montón de excusas de por qué no puedes encender tu cámara Zoom es una etapa clave en la vida de cada trabajador remoto. Monitorizar por webcam a tus trabajadores te puede salir muy caro.
Un tribunal holandés entiende eso. Recientemente falló a favor de un ex empleado de una empresa estadounidense por despido injustificado relacionado con el monitoreo de cámaras web. Sugirió que tal vigilancia es una violación de los derechos humanos.
Monitorizar por webcam a tus trabajadores te puede salir muy caro
Al empleado, que trabajaba de forma remota desde los Países Bajos para la empresa de software Chetu, con sede en Florida, se le ordenó mantener su cámara web encendida durante todo un día de trabajo para recibir capacitación. Ya compartiendo su pantalla, se negó, alegando que nueve horas de monitoreo en cámara eran una invasión a su privacidad.

Después de ser despedido por insubordinación, el empleado llevó a Chetu a los tribunales. Ahora un juez holandés finalmente falló a su favor y ordenó a la empresa que le pagara unos 73.000 dólares.
No es la primera vez que un país europeo se mueve para proteger a los trabajadores remotos. El caso recuerda una decisión de 2021 del parlamento de Portugal de prohibir los mensajes de texto de los empleadores después del trabajo. Sin embargo, para los trabajadores que residen en los EE. UU., donde el empleo a voluntad reina (lo que significa que los empleadores pueden despedir a los trabajadores en cualquier momento y por cualquier motivo), el caso de la cámara web probablemente habría sido diferente.